No es mío, lo "cojo prestado" mas que nada porque es un fiel reflejo de una cruda realidad; el Gobierno no recorta sus coches oficiales y las autonomías y ayuntamientos los multiplican, luego hablan de crisis, ¿que crisis?,
Para estos gastos de "nuestros políticos"; gastos en procesiones, fiestas y demás jolgorio como el de unas posibles Olimpiadas ... para esto si hay dinero de sobra.
¿Como nos van a tomar en serio?, si hablan de crisis y "ellos" siguen gastando a manos llenas.
Los políticos que piden a los ciudadanos que se aprieten el cinturón no se bajan del coche oficial. Los Presupuestos Generales de 2012 reflejan que la flota de coches oficiales no ha sufrido ningún recorte en el gobierno central, mientras que las autonomías y ayuntamientos los han multiplicado por cinco en los últimos diez años. España tiene 22 veces los coches oficiales de Estados Unidos, una exageración si se tiene en cuenta que en Estados Unidos viven más de 300 millones de habitantes frente a los poco más de 40 que habitan en España.
Los Presupuestos Generales del Estado para 2012 siguen dando mucho que hablar. Estos presupuestos señalan que el número de coches oficiales que funcionarán para la administración central en 2012 es casi idéntico al de 2011: 864 frente a 866 unidades. Así pues, mientras los políticos piden austeridad y recortan en las partidas que afectan a los ciudadanos, ellos no se bajan del coche oficial.
Además de los eximios dos vehículos de diferencia que hay entre el presupuesto de 2011 y el previsto para 2012, el número de conductores se reducirá en apenas 16 personas, desde los 974 que acabaron el año pasado a los 958 que se prevé que lo hagan éste. Estas bajas se producirán por jubilaciones que no serán cubiertas. Además, sus señorías no viajarán menos puesto que el presupuesto para combustible es el mismo que para 2011.
En España circulan unos 22.5oo coches oficiales.
Según fuentes consultadas por Diario El Aguijón de la Intervención General del Estado, en España circulan más de 22.000 coches oficiales, de los que unos 11.000 corresponden a ayuntamientos, 9.200 a las Comunidades Autónomas, 1200 en Diputaciones y unos 300 en organismos supramunicipales como mancomunidades. A ellos debemos sumar los más de 800 de la Administración central, que proporcionalmente es quien menos coches tiene. Estos coches oficiales llevan aparejados una plantilla de unas 50.000 personas. Una parte importante, son policías, sobre todo municipales que prestan al mismo tiempo el servicio de chófer y escoltas, principalmente en el caso de los ayuntamientos. Esta cifra, según las fuentes consultadas por Diario El Aguijón es cinco veces superior a la existente a hace 10 años, y achacan el crecimiento principalmente a la fiebre de los alcaldes al coche oficial, que provocó que las comunidades también compitieran en aumentar sus flotas para no quedar atrás en la competición, a costa del erario público. Además, nuestras fuentes señalan que hay también una flota “incontrolada” perteneciente a empresas públicas y empresas participadas con fondos públicos, por lo que la cifra de coches pagados a cargo del erario público es todavía mucho mayor.
Más de un coche por cargo público
Según denuncia el Sindicato Unificado de Policía (SUP) cada alto cargo del Gobierno (presidente, ministros o secretarios de Estado) cuenta con hasta cinco coches oficiales para sus desplazamientos . El SUP aclara que en esos datos del Parque Móvil del Estado no se incluyen los vehículos policiales, de la Guardia Civil o de Defensa, que tienen parques propios.
Según la documentación presupuestaria que hizo pública el gobierno, el total de altos cargos que hay en la Administración General (incluye Estado, organismos autónomos, agencias estatales y otros organismos públicos) es de 436. Eso significa que al menos cada alto cargo dispone de dos coches oficiales.
22 veces los coches oficiales que tiene Estados Unidos, un país de 300 millones de habitantes.
Las cifras españolas sonrojan al compararse con las de la primera economía del mundo. En Estados Unidos, el número de coches oficiales es de unos 1.000 en total, para una administración de más de 300 millones de habitantes. De hecho Barack Obama sufrió una fuerte caída de popularidad cuando aumentó la flota de vehículos de la administración central (Casa Blanca, Congreso y Senado) de 238 a 412. Eso sin entrar a valorar el valor de los coches oficiales de algunos alcaldes en España como por ejemplo Pedro Castro (Getafe), 120.000 euros de coche oficial, Manuel Robles de Fuenlabrada (100.000 euros), Rafael Gómez de Leganés (80.976 euros), Enrique Cascallana de Alcorcón, otro tanto… y así suma y sigue.
Y mientras, en Madrid, se prepara una nueva subida del billete del metro. Metro que no utilizan los cargos públicos como hacen en otros países como el alcalde de Nueva York que viaja en Metro, o en Holanda donde la reina viaja en bicicleta en sus traslados habituales. Claro que las comparaciones, son odiosas.